Acompaño mi día a día a entonar el mantra o el canto del Triambakan con el fin de sanar la atmósfera de mi tierra, Santa Brigida y sentir que dentro de nosotros resuena la vida, no solo las preocupaciones y la supervivencia inmediata, sino que, podemos compartir lo que nos une, nos acerca a nuestra atmósfera como seres sensibles.
No hay comentarios:
Publicar un comentario